Golpes,
Drogas y Mucha Pasión
Por: Paul Sanchez
Hace poco ocurrió
algo fuera del estadio monumental algo que mancho de rojo la historia de
la
“U”. Las ganas de ir al estadio alentar
al equipo de tus amores, tuvo que acabar en tragedia, insultos, consumo
de drogas y falta de organización entre las barras, terminó con la vida de un
barrista.
Las barras bravas son
grupos organizados dentro de una hinchada que se caracterizan por expresar sus sentimientos con cantos,
levantando la bandera y tocando el bombo en las gradillas del estadio.
Sin embargo, en Nuestro fútbol peruano no podemos dejar de
mostrar casos de violencia que en estos últimos años, se han convertido en un problema
serio para las personas que asisten a un
partido de futbol. .
El
fútbol como deporte se ha catalogado como
una referencia histórica para cada joven, que desde temprana edad se familiariza
con un equipo y hace que la pasión y la alegría
se vea reflejada en cada presentación de su equipo.
Por ello,
para las barras bravas cada
partido es una guerra” con lucha y entrega y donde el equipo contrario es “el enemigo”. Lo que
importa solo es ganar: por la razón o por la fuerza. Cada barrista alienta a su equipo con el alma y defiende sus
colores, con el simple hecho de llevarse
la victoria.
"El nivel
de conflicto entre hinchas aumenta a medida que crece el grado de
civilización, el motivo que lleva a los
jóvenes a asistir a las barras es el dominio de los amigos, que hacen que comentan violencia en los estadios”. (Comentò.Arturo.Ramos.Quispe)
El problema severo en las barras bravas en Lima es la drogadicción
y alcoholismo, que encuentra a jóvenes y niños sus mayores consumidores. Estas toman un rol
importante, pues son parte del espectáculo, Tratan de ver el futbol de una
manera diferente y darle el aliento a su equipo para obtener el triunfo.
Las
barras bravas cuenta con un grupo de líderes
que han creado una economía, que incluye
la distribución y venta de entradas de cortesía que reciben de los clubes, gracias
al apoyo de varios a jugadores y
dirigentes.
Están conformadas por
personas jóvenes quienes encuentran una justificación para pertenecer a asociaciones
deportivas, siendo esto no un problema del Fútbol, sino un problema de la Sociedad.
Las rivalidades, desajustes emocionales, entre
otros, van creciendo de manera latente.
Mi pasión es
la trinchera norte
Fabio
Quintana es un estudiante de la
universidad Nacional de Ingeniería, que desde
pequeño su pasión por alentar a
Universitario de deportes lo hizo hacerse grupo de la trinchera norte
Su
pasión y su entrega se hace una rutina cada fin de semana al momento de ver a
su equipo jugar, lo lleva alentar a las
gradillas del estadio saltando, cantando y apoyando como lo hacen
todo los miembros del grupo de la Trinchera Norte.
Nos cuenta que uno de sus miedos, es ver como las barras bravas sienten la adrenalina en cada partido, y hacen que los
lleven a una ira frustrada y reprimida y buscan pelear entre los equipos
rivales porque piensan que así pueden hacer respetar la camiseta de sus amores
sin medir sus actos o acciones, pueden resultar muchas personas heridas o
muertas.
"Uno se hace barrista alentando al equipo de tus amores, en las buenas y en las malas, todos somos
uno, todos somos iguales”.
Manifiesta
que ser barrista no es arriesgar la vida de otras personas si no alentar,
caminar y seguir a tu equipo a cualquier
lugar donde vayan a jugar. Alentar los 90 minutos de partido y no consumir
drogas ni buscar conflictos, hacen que tu equipo quede mal.
¿Hinchas
o PANDILLEROS?
La rivalidad que enfrentan clubes como Alianza Lima y Universitario se han hecho muy
conocidas entre los barristas en los últimos tiempos. Sin embargo esta competencia
que existe entre ambos equipos ha hecho que los hinchas fomenten la violencia dentro y fuera del
estadio.
Pero,
¿dónde cabe la imagen que tenemos de pandilleros de 18 años con la cara pintada
gritando y robando?, ¿ellos se llaman hincha? Cuando causan salvajismo y miedo por las
calles donde suele circular al momento de dirigirse al estadio.
¿Ellos son hinchas?
Según el periodista
deportivo Juan Linares asegura que en realidad no son hinchas sino vándalos que
se unen a un grupo de personas con el fin de ir alentar a sus equipos para que
comentan fechorías, robos, secuestros y matanzas, y dejan entre ver que las
barras bravas son grupos violentos.
En el 2013 un estudio
realizado en la Universidad Mayor
Nacional de San Marcos y por la Policía
Nacional da cuenta que el 65% de pandillas o barras bravas
conformadas abandonaron sus estudios y otros sin haber concluido la secundaria y, en algunos casos, la primaria.
Según el Consejo Nacional de
Seguridad Ciudadana informó que en 40 distritos de Lima existen más de 410 de grupos de bravas o
pandilleros que se dedican a secuestros, vandalismo y matanzas y en algunos que se dedican solo han ámbito
deportivo alentar a sus equipos.
¿Qué nos lleva a ser parte de
las barras bravas?
Según el psicólogo Pedro
Rojas del Colegio Peruano Japonés nos cuenta que es común que en los jóvenes se originen crisis
familiares y esto los lleve a caer en la drogadicción y en el alcoholismo, ya que es consecuencia de la falta de
comunicación que se da entre padres e hijos ya que los padres se dedican más tiempo al trabajo que al estar pendientes de los problemas que
puedan tener sus hijos.
“La falta de
autoestima, de valores en el hogar y el cariño de los padres hacen que no
puedan evitar que sus hijos se sientan más cómodos integrando un grupo de barras bravas”. (Yanet Rocha. El Peruano
18/06/12)
Las barras bravas son
grupos de pandilleros que usan como pretexto los colores de las camisetas de
sus equipos para cometer actos delictivos y cometer sus chantajes o agresiones
en vías públicas. La solución sería que las, que los
clubes no apoyen a este tipo de organizaciones, al poner las tribunas populares a un menor precio sino a un precio mayor y que los hinchas estén empadronados para que
puedan entrar al estadio sin ningún inconveniente como en países de
Inglaterra, España y Alemania.
"Los
enfrentamientos entre hinchas, son la consecuencia de la crisis social y familiar, ya
que buscan satisfacer y elevar su autoestima". Comentó el sociólogo Juan
Álvarez Navarro
Los equipos de fútbol
se han ido creando con el paso del
tiempo y han llevado a que diversas
personas del Perú sientan una sensación por alentarlos sin tener nada a cambio.
Esta acogida no solo ha traído gente de clase alta sino gente de varias partes
del Perú con el fin de sentir la emoción del fútbol.
La violencia sin
embargo se apodera de las barras bravas siendo el fútbol no un espectáculo sino
un campo de guerra. Sin embargo, los que se hacen llamar barristas se dedicaban a ver los partidos y alentar al
equipo de sus amores. Así mismo los efectos que causan así a las personas
inocentes que estén a su alrededor es sentir miedo, pánico y algunas veces generando peleas que llevan incluso a la muerte de personas.
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