Bajo el Umbral

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miércoles, 2 de julio de 2014

Ser un Asperger



Ser un ASPERGER
Por Gabriela Torres Morales

Se calcula que siete de cada mil personas en el mundo padece de síndrome de asperger y que se diferencia del autismo infantil temprano en que en este trastorno no se observa retraso en el desarrollo del lenguaje sin embargo tienen dificultad para la interacción social. 


Ser asperger es simplemente, ser distinto a los demás, pero eso no significa que están enfermos, porque ellos no se consideran así, porque en realidad no lo están, con esto se quiere decir que para las personas con asperger, los que no son normales, son los demás.

IRONÍAS


Las personas con asperger tienen dificultad para la interacción social, no comprenden por ejemplo: los dobles sentidos o las ironías.

Hay ironías que muchos de ellos no entienden, por ello hay que explicárselos, hay que enseñárselos, tienen que aprenderlo, tienen que aprender que si un signo, señal o alguien le está guiñando un ojo es una broma, algo que nosotros entendemos perfectamente, como un chiste o una broma a ellos les cuesta trabajo comprender, le buscan el por qué o la lógica y tratan de entender porque ríen los demás de algo que puede tener una explicación o respuesta, son muy directos y suelen hacer las mismas cosas todo el tiempo, como una rutina diaria todo el tiempo.



Quienes padecen asperger suelen tener un interés muy específico por un campo del conocimiento pero dejando de lado todo lo demás.
Se diferencia del autismo infantil temprano y de otras formas menos específicas en que en el trastorno de asperger no se observa retraso en el desarrollo del lenguaje, y no existe una perturbación clínicamente significativa en su adquisición.

No hay retardo, por ejemplo en la edad en que aparecen las primeras palabras y frases, aunque pueden existir particularidades cualitativas (por ejemplo gramaticales) pues la mayoría de ellos, aprenden a leer desde muy pequeños desde los 3 o 4 años y eso definitivamente llama mucho la atención, así como una preservación generalizada de la inteligencia. Aunque la edad de aparición  y detección más frecuente se sitúa en la infancia temprana (entre 3 a 4 años), muchas de las características del trastorno se hacen notorias en frases más tardías del desarrollo, cuando las habilidades de contacto social comienzan a desempeñar un papel más central en la vida de la persona.

PRIMERAS ALERTAS


“Noté que Juan José a la edad de 2 años agarraba sus libros y los leía, repetía lo que yo le había leído en algún momento una y otra vez, tenía la manía de poner todo lo que encontraba, ya sean juguetes u objetos, en fila, reía solo, como si mirara a alguien pero rara vez me miraba directamente a los ojos, desde muy pequeño era muy independiente, aprendió a ir al baño solo a los 2 años, a los 3 leía y a los 4 ya escribía, dibujaba y pintaba” explica Delia Morales, abogada y madre de un niño con asperger.

El síndrome de asperger es un trastorno generalizado del desarrollo, por lo que se caracteriza por la presencia de un conjunto de síntomas relacionados, más que por la de un único síntoma aislado.

Entre sus características habituales se encuentra la presencia de un deterioro cualitativo en la interacción social, así como de patrones estereotipados y restringidos de comportamientos, actividades e intereses.

No se observa un retraso clínicamente significativo en el desarrollo cognitivo(los procesos tales como la memoria, la atención, el lenguaje, percepción, la solución de problemas o inteligencia) y tampoco se produce retraso en la adquisición de lenguaje.
 
Este síndrome se manifiesta de diferente forma en cada individuo pero todos tienen en común las dificultades para la interacción social, alteraciones de los patrones de comunicación verbal y no verbal, intereses restringidos, inflexibilidad cognoscitiva (que se muestra en la adhesión a rutinas y rituales que pueden o no ser funcionales) y comportamental, dificultades para la abstracción de conceptos, coherencia central débil en beneficio del procesamiento de detalles, interpretación literal del lenguaje, dificultades en las funciones ejecutivas y de planificación, la interpretación de los sentimientos ajenos y propios.

“lloraba, se angustiaba, si le cambiaban de actividad bruscamente, por ello tenía que hablarle, hacerle entender que no podía estar ahí sentado frente a la televisión todo el día, que tenía que hacer otras actividades, podía ver hora tras hora televisión y se aprendía los diálogos de los personajes animados para luego repetirlos en cualquier momento del día, si es que alguien le preguntaba algo,  tenía dificultad para comunicarse en el sentido de no poder ordenar sus ideas cuando quería algo, por ejemplo cuando él deseaba un pan con mantequilla decía: “¿quieres pan con mantequilla?” en vez de decir “quiero un pan con mantequilla” no hablaba en primera persona afirmando algo sino en modo de pregunta y en segunda persona” agregó Delia

DIFICULTADES SOCIALES

Posiblemente, el aspecto más disfuncional del síndrome de asperger sea la ausencia de empatía demostrada.

 
Los individuos con éste síndrome experimentan dificultades en aspectos básicos de la interacción social, lo que puede incluir dificultades para forjar amistades, o para compartir satisfacciones o actividades gratificantes con las otras personas (por ejemplo, mostrarle a otros un interés propio en determinados objetos)
También puede existir una ausencia de reciprocidad social o emocional y un deterioro en la comunicación no verbal en pareas como el contacto ocular, la expresión fácil, la postura o el gesto.
Supone una discapacidad para entender el mundo de lo social, que se manifiesta al nivel de comportamientos sociales inadecuados proporcionándoles a ellos y sus familiares problemas en todos los ámbitos.
Las personas con asperger suelen mostrar conductas, intereses y actividades restringidas y repetitivas, en ocasiones de forma anormalmente intensa o focalizada.
Pueden verse atrapados en rutinas inflexibles, realizar movimientos repetitivos o mostrar una gran preocupación o interés por determinados componentes de algunos objetos. Una de las características más llamativas del síndrome de asperger es la fijación por determinadas áreas de interés específicas y concretas. Por ejemplo, pueden recopilar grandes cantidades de información sobre un tema relativamente concreto, como los datos meteorológicos o los nombres de las estrellas, sin que exista necesariamente una autentica comprensión global del tema de interés. Así un niño puede presentar un interés en memorizar números de serie de modelos de cámaras fotográficas sin que exista en él, un interés por la fotografía.

COMPORTAMIENTO INUSUAL


Este comportamiento suele manifestarse en la edad escolar, normalmente a los 5 o 6 años según estudios en Estados Unidos. Aunque estos intereses pueden variar, suelen hacerse más inusuales y centralizados con el tiempo, de forma que a menudo pueden llegar a dominar las interacciones sociales hasta el punto de que la familia más cercana del niño acabe involucrándose en ellos.   

“Juan José siempre, desde pequeño fue muy tranquilo, muy independiente, pero cuando empezó a crecer, a la edad de 2 o 3 años yo ya notaba que no era normal ese comportamiento, con una o dos leídas a un libro que le di, él ya sabía leer, repetía e incluso se aprendía las canciones de los comerciales, el problema surgía cada vez que íbamos a una fiesta o cumpleaños, él tenía problemas de adaptación, salía despavorido cuando escuchaba mucho ruido, se tapaba los oídos o ya se quería ir a la casa, no interactuaba con los otros niños de su edad, simplemente, no le interesaba hacer amistad con nadie” explicó Delia, madre de un niño con el síndrome de asperger.

Entonces si tendríamos que hablar de éste síndrome, tendríamos que decir que es una condición de vida, es algo con lo que se nace, son personas que tienen una forma de pensar distinta porque tienen un procesamiento mental distinto, son personas que tienen una gran capacidad para sintetizar  datos, información y una menor capacidad en la empatía y en las relaciones sociales lo cual hace que en la interacción con el mundo, en nuestro mundo, tengan problemas a niveles de comprensión de normas sociales, a nivel de comunicación y a nivel de imaginación entre otras cosas. 

PENSANDO DISTINTO


El ser asperger no es ser alguien distinto, sino alguien que piensa distinto, que tiene problemas para relacionarse con los demás siendo éste su principal dificultad, para ellos nosotros somos los “raros” por verlos a ellos como alguien diferente.
Las personas con este síndrome, se tornan demasiado concentradas u obsesionadas con un solo objeto o tema, ignorando todos los demás. Quieren saber todo sobre ese tema y con frecuencia, hablan poco de otra cosa.

Ser asperger no significa padecer de alguna enfermedad mental, pues ellos no se consideran enfermos, simplemente, ellos ven la vida, la entienden de forma distinta, las normas sociales con las que nacemos aquellos que no padecemos de éste síndrome, tenemos innata la capacidad de socializar, aceptar y saber cuáles son las normas de conducta en una y con la sociedad, sabemos o aprendemos por imitación cómo socializar porque dependemos de eso como seres humanos, ya que somos seres sociales por naturaleza, sin embargo, ellos no dependen de los demás, pues desde niños, en la mayoría de casos, son muy independientes.


MIENTRAS MAS TEMPRANO, MEJOR 

No existe ningún tratamiento único que sea el mejor para todos los niños con síndrome de asperger. La mayoría de los expertos piensa que cuanto más temprano se inicie el tratamiento, mejor.
Los programas para niños con asperger enseñan habilidades basándose en una serie de pasos simples y empleando actividades altamente estructuradas. Las tareas o puntos importantes se repiten con el tiempo para ayudar a reforzar ciertos comportamientos.



Los asperger no son distintos, conviven con nosotros en la sociedad, en éste mundo caótico que llamamos vida, sólo que ellos necesitan más tolerancia y un manual de instrucciones de como interactuar en sociedad con las que nosotros, los No asperger o los “neurotípicos” como nos llaman ellos a nosotros, ya nacemos. Si fuéramos una sociedad más parecida a ellos, el mundo sería más fácil de manejar, pues en ellos hay mucha honestidad, poca mentira, pues no pueden ni saben engañar, son directos en su forma de pensar y expresarse, demasiado quizás por ello son vistos de forma diferente, llaman la atención y son señalados como “raros” por ser simplemente Honestos.


El siguiente video puede ilustrarnos un poco más sobre éste síndrome. 

Link de video
Mi amigo Hugo, es asperger


 

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