Expediente Secreto
por: Alexander Sanchez
Estamos en una época donde nada nos podría sorprender. Ni
naves con formas de platos, ni muchos menos seres extraterrestres que visitan
el Perú. ¿Pero será cierto?, que una nave mida más de 15 kilómetros o que estos
objetos voladores puedan levantar cosas sin esfuerzo alguno. Es por eso, que
con el pasar del tiempo las cosas siempre salen a la luz, ya sean también para
conducir o aportar a la humanidad.
En el 2001, una nave sobrevoló el
cielo del distrito de
Luces de Piura
Ese mismo año, un llamado a la
OIFAA alertó la curiosidad de todo el equipo: ocho objetos voladores no identificados
en aires piuranos fueron vistos durante una procesión donde acudieron más de
cien personas. Uno de los camarógrafos de la zona grabó los instantes donde las
luces de color blanco aparecían y desparecían del cielo. Sin duda una
información valiosa la que tenía este camarógrafo, además se corroboraba con
los más de cien testigos que en esos momentos se encontraban en la procesión.
Entre los grandes mandos militares de la fuerza aérea, este caso no tenía gran
relevancia, pero olvidaban que junto a ellos también trabajaban civiles que sí respiraban
el aire de la noticia y de lo que era muy importante investigar. Cuando el Dr
Anthony Choy llega a lugar de los hechos como él lo cuenta, “sin recibir ningún
sol de parte la FAP. En el 2002 con una grabadora en mano llego hasta Piura,
exactamente a Chulucanas”. Rápidamente
se dio cuenta de que este era la noticia más relevante que podría haber visto. Además
esta era la noticia que Choy busca para poder resaltar el trabajo de la OIFAA
en los medios de comunicación, ya que se tenía todo lo que requería una investigación:
testigos, videos, fotos, audios.
El Perú no se quedaba atrás en lo
que respecta a casos sobre ovnis. Ya no era solo el caso Roswell en EE.UU,
tampoco el caso Cabo Valdés en Chile, sino también el Perú se unía a esta lista
con grandes casos de fenómenos de ovnis.
¡Porque no te callas!
Durante la investigación, Choy lo
denominó como “accidente de Chulucanas”. Muchos medios de la zona se enteraron
de que unos investigadores del gobierno estaban a cargo del caso personalmente.
Eso llamo la atención de todos los medios de Piura, uno de ellos fue RPP
(Piura), quien fue el primer medio que se enteró sobre los primeros casos y
testimonios que tenía el doctor. “Tenemos un caso de un piloto peruano que asegura haber visto una
nave de más de 15 kilómetros de largo” esto hizo generar más
especulaciones en los medios. Estas
declaraciones no solo pasaron en RPP Piura sino también en los medios de
comunicación de lima, como también a los oídos del director del Departamento de
Investigación Aéreo Espacial (DINAE), coronel
Jose Rafo Olonche, y el de la OIFAA, comandante Julio Chamorro, quienes estaban
en la cuerda floja por las declaraciones dadas. A la llegada del ufólogo, se
reunieron él y los grandes mandos militares para hacer un resumen de lo que
investigó en Chulucanas, desde ahí no sé hablo más del tema, ¿Por qué? El caso
Chulucanas aun no salía a la luz ¿acaso el expediente había sido guardado para
no alterar el orden público, ni manchar la imagen de la institución? El 2003
Choy fue invitado a un programa donde por primera vez habló sobre lo que pasó
en Piura, y lo que fue el incidente de Chulucanas. De pronto se armó el
escándalo. Si el suceso había ocurrido en el 2002 y las declaraciones recién se
daban dos años después de lo ocurrido, ¿Por qué la FAP quería ocultar esta información?
¿Cazando un ovni?
En una reunión, en restaurante
conocido, donde asistieron los grandes
mandos de la FAP, pero esta vez, no solo fueron oficiales sino además un grupo
del servicio de inteligencia, que
sentados esperaban la llega de
doctor Choy, “ese día el director de la DINAE me propuso ser
capitán de la fuerza aérea del Perú, aunque comencé a hacer muchas
preguntas después de esa propuesta ¿Tendré libertad de hacer mis
investigaciones? ¿Podré publicar información en los medios? ¿Qué grado de
libertad tendré para salir a hacer mis investigaciones?” el director contesto las
preguntas con un sí, muy positivo, pero
cuando Choy dijo que lo iba a pensar causó un cambio de expresión en el oficial. Minutos
después, la celebración seguía, felicitaban
al doctor por su gran trabajo en la
institución, con un pisco a la mano, ellos brindaban a su nombre, “Al tercer pisco que tomé todo se me borró, no
pude recordar nada. Solo me acuerdo que terminé en un baño junto a un oficial
que me cuidaba. Llamé a mi esposa y ella me mandó un taxi, justo en ese momento
llego una periodista de México y me hizo una entrevista todo mareado. Hablé
cada cosa tanto así que parecía otro idioma”. Al día siguiente ya consciente de sus actos fue a la oficina de
la OIFAA con su abogado para denunciar un acto de dopaje, según él, ellos quería
saber toda la información que él sabía, que conscientemente no la diría.
Los peligros de la información
En el 2004, computadoras de la
OIFAA fueron robadas. Miles de datos se perdieron y entre ellas el caso
Chulucanas. Además esto representaba de alguna manera el cierre de la OIFAA
tras los escándalos dados. Los profesionales que fueron encargados dejaron de
ir repentinamente según Choy, aunque según el comandante Chamorro, director de
OIFAA (2001, 2002,2003), esta institución permaneció en uso hasta finales del 2009. Años más tarde
(2005), “Chamorro sería encontrado en el mismo
edificio donde se le detuvo al ex integrante de la OIFAA, Dr Fernando
Fuenzalida, quien era víctima por su pasado en la OIFAA. Fuenzalida fue
detenido en su departamento por
encontrarse allí 70 pastillas de
éxtasis y 7 plantas de marihuana, pero años más tarde se comprobaría su
inocencia, siendo víctima de una trampa” ¿Coincidencia?
Los ex trabajadores de la OIFAA
sufrían las consecuencias de trabajar en una organización manejada por el
gobierno. “Muchos de ellos fueron desprendidos de sus investigaciones e
informaciones que tenía en sus casas, robos de computadoras y de hojas
guardadas eran el pan de cada día”. El doctor Choy también fue víctima de robo
de su computadora que se encontraba en su oficina, lo que conllevó que
escondiera toda su información. ¿Acaso una modalidad de robo de computadoras?
¿Coincidencia?
“Antes que se entere de un
fenómeno anormal toda la opinión publica primero tiene que pasar por EE.UU. Ellos
manejan toda la información, y si no se consulta con ellos estarías cometiendo
una grave error, y es por eso que también tenemos en el Perú enviados de la
CIA, quienes manejan esta información e informan a la embajada”. ¿Trabajando
para otros?
LA DIFAA
Tras el cierre de la OIFAA en el
2009 (según Chamorro), varios casos sonaban cada vez más en el Perú lo que
conllevó a reabrir, pero ahora como departamento de Fenómenos Aéreos Anómalos
(DIFAA), su creación estuvo a cargo del coronel Julio Vucetich (director de la
DINAE) en el 2013, y en la actualidad director de la DIFAA, el coronel habló
sobre el nuevo procedimiento para reportar casos y además se pronunció sobre el cierre de la OIFAA, “hubo
un robo de tres computadoras en otra sede,
en donde estaba la información de lo estudiado del 2001 al 2005, por ahí viene
el tema del cierre de la OIFAA” ¿entonces no tenemos ninguna información de lo
que paso en esos años?
¿Oculto igual a
seguro?
Queda claro que meterse con las investigaciones del gobierno
es meterse con EE.UU, y no por algún tratado sino por el poder que tiene éste,
pero ¿habrá otro poder más grande que el de Estados Unidos? A que le tendrán
miedo cuando se da información sobre ovnis,
sobre todo porque ya no se habla de ovnis, ahora se habla de
civilizaciones de ovnis. Mucha gente habla que Estados Unidos tiene tecnología
extraterrestre por eso su tan evolucionada capacidad para crear cosas. También se dice sobre los casos de madres que
son investigadas en un hospital militar, a raíz de un embarazó extraterrestre, acá en el Perú, pero todo eso ¿será cierto?
todas la preguntas de nuestra investigación, serán complementadas y comprobadas
algún día, o será que lo mantendrán oculto, para la seguridad, dizque nacional.
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